Confesó haber asesinado a más de 300 niñas en Colombia, Ecuador y Perú, y fue condenado en 1983. Sin embargo, recuperó la libertad 15 años después por buena conducta.
Pedro Alonso López es considerado uno de los asesinos seriales más letales de América Latina. El hombre confesó haber asesinado a más de 300 niñas en Colombia, Ecuador y Perú, con un patrón de conducta que estremeció a la región.
Apodado por la prensa como “El Monstruo de Los Andes”, López fue condenado por sus crímenes en 1983. Sin embargo, fue liberado en 1998 tras cumplir 15 años de prisión, beneficiado por su buena conducta durante el cumplimiento de la pena.
La última vez que se tuvo registro de su paradero fue el 22 de septiembre de 1999, cuando fue visto en una oficina del Registro Nacional en Bogotá. Desde entonces, su destino es desconocido y su desaparición sigue generando inquietud en Colombia.
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